Saltimbocca alla romana - Un verdadero placer

 Recuerdo cuando era pequeña, y bueno, también hace unos años cuando aún vivía con babbo, verlo los domingos por la mañana desde muy temprano, haciendo la salsa para la pasta, silbando y cantando sin música de fondo. El olor de la cocina inundaba toda la casa de una profunda sensación de hogar, y luego, al almuerzo, recuerdo comer como si fuera no solo el mejor, sino el único restaurante de todo el mundo. 

Mi papá dice que no es chef, que él es cocinero. Aprendió el oficio con la nonna baffona, su abuela. Con ella descubrió las bases de la cocina tradicional italiana, el amor a los ingredientes y la historia del origen de cada plato. Escucharlo hablar sobre cómo cocinábamos los italianos antes y después de la segunda guerra mundial, sobre cómo la escasez que afrontamos luego de ésta transformó nuestra gastronomía, o acerca de la adaptación de algunos nuevos ingredientes resultado de la migración, es sentarse a escuchar un cuento fascinante que uno no quisiera que se terminara. 

Eso mismo hace cuando da sus cursos de cocina, transporta a las personas directamente al corazón de nuestra gastronomía, a los pesados mesones de madera sobre los que se da vida a la masa de la pasta y a los cucharones de cada nonna, preparando las recetas que por generaciones fueron reproducidas por hijas que se volvieron madres, y luego abuelas, por padres como el mío en la cotidianidad de nuestra casa. Nuestras recetas son nuestra cultura, nuestro tesoro, y en ocasiones, nuestro secreto más valioso. 

Hoy, les traigo esta ricetta que para mí es un bocado de cielo, aprobada por il mio papà y esperando que la disfruten y que intenten hacerla al pie de la letra.

Un secreto, entre nosotros.

Saltimbocca alla romana: 

INGREDIENTES (para cuatro personas) 

4 escalopes de ternera.

4 tajadas de prosciutto “San Daniele” o dulce .

4 hojas de salvia.

50 gr de mantequilla. 

8 cucharadas de vermut blanco.

Sal y pimienta recién molida (al gusto).

1 cucharada de harina de trigo.

PREPARACIÓN

-Extiendan los escalopes y coloquen una tajada de prosciutto y una hoja de salvia sobre cada uno. Enróllenlos y fíjenlos usando un palillo.

-En un sartén, calienten la mantequilla y frían los rollos, girándolos para que el proceso sea uniforme en toda su superficie.

-Agreguen el vermut blanco, sal y pimienta al gusto y dejen hervir durante 10 minutos para que la carne ablande. 

-Dispongan los escalopes en una bandeja caliente y retiren los palillos. 

-Para la salsa: agreguen al jugo resultante de la cocción en sartén, una cucharada de agua y una de harina de trigo (yo solo agrego un poco de agua de ser necesario, para que sea gluten-free) y diluyan bien. 

Para finalizar, bañen los escalopes con la salsa, sirvan caliente y por supuesto, disfruten.

 Buon appetito ragazzi!

Valentina Provitali, Italia Per Tutti